Desde pequeños talleres hasta grandes corporaciones industriales realizamos instalaciones de aire comprimido que gestionen el correcto flujo del aire con el fin de ofrecer a nuestros clientes un sustancial ahorro económico y una mejor eficiencia energética.
Con la idea errónea al entender el poco valor que le damos al aire, en muchas industrias no somos conscientes del impacto económico que puede soportar una incorrecta utilización de los sistemas de aire.
Un correcto sistema de aire comprimido debería estar compuesto por:
Personal altamente cualificado tanto para labores de construcción como para labores de mantenimientos preventivos y proactivos.
Debido a la complejidad de estas instalaciones, es muy importante contar con personal cualificado que vele por el correcto funcionamiento del sistema. Al tener una instalación óptima evitaremos fugas de energía que repercutirán directamente con el ahorro económico.
Además evitaremos más labores de mantenimiento que generen interrupciones en la producción mejorando la eficiencia productiva y la mejora de calidad en nuestros procesos de fabricación.